jueves, 9 de enero de 2014

Damn. Acabo de leer cosas que escribí hace tiempo, y no puedo evitar sentir que tanto tiempo de inacción me hizo retroceder en cuanto a lo que soy capaz de escribir. Necesito retomar el hábito.

domingo, 5 de enero de 2014

Trying to be social

  Pasó otro año, y hace demasiado tiempo que no paso por acá. No debí hacerlo. A fin de cuentas con quien mejor puedo hablar es con esta hoja virtual en blanco. Que no cuestiona ni juzga, simplemente me lee, me escucha. Porque quienes son capaces de responder no entienden que a veces no deben hacerlo. Que a veces lo que uno necesita es solamente ser escuchado, con mucha suerte quizá entendido. Pero no respuestas, no cuestionamientos ni juicios, sólo silencio y aceptación. ¿Serán tal vez las cualidades más difíciles de encontrar en una persona?

 Últimamente estuve intentando ser social, relacionarme con la gente, conocerlos, dejarme conocer, étc. Si bien puedo rescatar algún que otro momento, supongo que debo decir que finalmente el experimento fue un fracaso. Es infinitamente rara la ocasión en que soy capaz de entender las cosas que hacen los demás, lo cual se ve muy dificultado por el hecho de que cuando uno no entiende el accionar del otro e intenta hacerlo, el otro rara vez intenta facilitar el proceso. Parece ser que de manera innata, una de las características más grandes del ser humano terminar por ser el egoísmo. Pero no el "egoísmo sano" que todos deben tener, de preocuparse por sí mismos, sino aquel egoísmo vicioso que te permite pisotear a otros si eso va a generar algún tipo de beneficio, o simplemente evitar una situación ligeramente molesta. Parece ser que hoy donde la gente está por todos lados, donde entrás en internet y la gente te cae a cascadas, el acto de descartar personas sin mayor motivo es una práctica usual. Es tan fácil contactar tantas personas que... no sé, ¿supongo que lo terminan viendo como estar en un hipermercado y cada persona es una latita en una estantería? O al menos así se tratan entre sí. Agarran una lata, la miran un poco, interactúan, y donde encuentran el más mínimo desagrado, la dejan a un lado y agarran otra; y repiten.

 No me gusta. No lo entiendo, y no estoy seguro de querer entenderlo. Para la mayoría parece ser más valioso tener razón que llevarse bien con alguien. Ser el que está en lo correcto, ser el mejor, es todo competencia, todo discusión, y sólo te podés llevar bien con quien ve las cosas exactamente igual que vos, o no, pero al menos admite constantemente estar equivocado. Todos quieren ser reyes. Todos aplican reglas en cuanto a cómo los demás deben llevarse y tratarse con uno; pero nadie sigue sus propias reglas al tratarse con otros.

  Me cansé. Necesito descansar de toda esta mierda, o no sé. Necesito tal vez más gente que salga de todo esto. Necesito otros que no lo entiendan, alguien con quien compartir mi desentendimiento, mi decepción. Tal vez eso me de algo de esperanzas.